Hasta un salón velatorio ubicado entre San Martín y Sucre llegaron anoche los restos del conocido comunicador Humberto Rubín, quien falleció ayer, tras enfrentar complicaciones de salud, según confirmaron sus familiares.
Leo Rubín, hijo del reconocido radialista, comentó que hasta el salón velatorio se acercaron los oyentes de la leyenda del periodismo. Esto constituye solo una muestra del legado que dejó el comunicador en la sociedad paraguaya.
“Humberto era un hombre al que le encantaba la cultura. En los programas de televisión siempre invitaba artistas. Entró al corazón de muchas personas a través de la radio y así pasaron varias generaciones”, relató su hijo.
Leo Rubín mencionó además que en los espacios radiales su padre se daba el gusto, por ejemplo, de leer poesía, pese a los vertiginosos apuros por brindar información.
“Cuando tenía que batallar y ser el primero, quería serlo. Él dejó en el mundo de la radio innovaciones como los móviles en vivo y el quinto poder, un espacio para que la gente llame y diga lo que quiera. Marcó tendencia, incluso con los horarios”, expresó su hijo.
Hoy, a las 9:00, sus seres queridos y discípulos del periodismo podrán despedir a Humberto Rubín en la Radio Ñandutí, una emisora que el radialista fundó en 1962. En esta frecuencia, el luchador social se enfrentó al stronismo y emprendió batallas a favor de la libertad de prensa.
Tras esta despedida, los restos del reconocido comunicador serán inhumados a las 11:00 en el Cementerio Israelita de Asunción.
El icónico radialista era oriundo de Pilar, departamento de Ñeembucú. Además de su vasta trayectoria en los medios de prensa, Humberto Rubín desempeñó una función ecologista en el país, lo que lo motivó a fundar en el 2009 “A Todo Pulmón Paraguay Respira”.
