El especialista consideró que “estamos atravesando el ojo de la tormenta”, alegando que la economía se puede separar en tres grupos de acuerdo al impacto económico de la pandemia en cada sector: “Uno al que le va bien, otro que se mantiene (no crece ni decrece de manera importante), y un grupo al cual le va mal”.
Ante la interrupción de la mayoría de las actividades presenciales, ya sean sociales o laborales, la sociedad acudió a la virtualidad, por lo que el sector de telecomunicaciones muestra un gran crecimiento. Según el economista, el internet pasó a ser la principal y más requerida herramienta del sector con un crecimiento del 14,8%, que incluye desde la contratación de servicio en el hogar, como la de ampliar el ancho de banda ya existente.
Los otros sectores que también mostraron crecimiento en el primer semestre del año son los agronegocios, tanto la soja, como la carne, presentan números positivos este año: “Un aumento en la exportación de soja de 12% hasta julio y de carne del 10% hasta el mismo mes”, detalló, y agregó que el tercer sector favorecido es el de la construcción, con un crecimiento del 7,8% hasta junio.
“En las últimas semanas hubo una escasez de cemento, que ha llevado a un aumento del precio, debido a la dinámica que está teniendo este sector, es decir, las obras están continuando”, sostuvo.
Por otro lado, se encuentran los sectores que se mantienen, es decir sin mucha variación de crecimiento y caída, que tienen que ver con el consumo de elementos e insumos básicos de la vida cotidiana, como los bancos, que tienen una proyección de crecimiento de 2%, los supermercados que tienen hasta junio un crecimiento pequeño de 1,7% y el sector farmacéutico con -1,4%, es decir, una variación pequeña. “A pesar de la crisis, la gente no deja de comprar alimentos y medicamentos”.
En tercer lugar, Ferreira señaló a los sectores más afectados como “economía urbana”, que son los que más empleos generan. El sector de equipamientos del hogar, muebles y electrodomésticos presenta una caída del 9,8%, la venta de combustible una caída de 13,8%, lo que se explicaría por las restricciones de movilidad en los meses de abril y mayo, según indicó el especialista.
También, la venta de vehículos cayó en un 19,2%, la venta de ropas e indumentaria una disminución del 22,4% y, finalmente, “los sectores más golpeados como el comercio de frontera, que tiene una caída acumulada del 50% en lo que va del año y una caída del 97% en los meses de abril y mayo, eso es prácticamente una paralización total. Y el sector más golpeado de todos es el de hotelería, restaurantes y eventos que tiene una proyección de caída, según datos del BCP, de un 85% para este año”, afirmó el analista.
En este sentido, el economista Amílcar Ferreira manifestó que aún se prevé un panorama complicado debido a que se estima que la pandemia duraría hasta fin de año, e incluso hasta el primer trimestre del 2021.
«Hay que estar preparados para aguantar esta última parte del año y quizá el primer trimestre del año próximo. A partir del segundo ya vamos a empezar a mejorar. El Fondo Monetario Internacional (FMI), en su ultima proyección, ubica a Paraguay con la tasa proyección de crecimiento más alta de toda Sudamérica, un 6%», concluyó.
